¿Qué lavadora escoger en 2023?

Las lavadoras, cada vez más inteligentes y conectadas, se han convertido en equipos sofisticados que incorporan mejoras y avances de última generación a las funciones tradicionales de lavado y secado. Esto les permite llevar a cabo la colada de manera más rápida y eficiente.

Ahora, procederemos a revisar las características fundamentales que debes tener en cuenta para asegurarte de que satisfaga tus necesidades y no se vuelva obsoleta en un corto período de tiempo.

El primer aspecto a tener en cuenta al adquirir una lavadora es decidir si preferimos una integrada o una independiente. Las lavadoras integradas son ligeramente más compactas, diseñadas para encajar perfectamente en los muebles de cocina, incluso permitiendo la instalación de puertas a juego con el mobiliario. Por otro lado, las lavadoras independientes pueden ser utilizadas tanto en la cocina como en un lavadero o baño, siempre que haya acceso a una toma de agua cercana.

En segundo lugar, debemos considerar si preferimos un modelo de lavadora de carga frontal o de carga superior. Las lavadoras de carga frontal son las más habituales, con una apertura circular en la parte frontal de la estructura. Sin embargo, si tenemos limitaciones de espacio, podría ser conveniente optar por una lavadora de carga superior, que suele ser más estrecha. Es importante tener en cuenta que el acceso al tambor desde la parte superior requiere que esa área esté despejada, por lo que no podremos instalarla bajo la encimera de la cocina.

Optar por lavadoras de mayor capacidad implica un desembolso inicial mayor, pero también nos permitirá ahorrar energía, detergente y agua al poder lavar toda la colada de una sola vez en lugar de realizar múltiples lavados. Por lo general, para familias de hasta dos o tres miembros, una capacidad de carga de 6 kilos suele ser adecuada, mientras que si somos una familia numerosa, probablemente sea más conveniente elegir un modelo con una capacidad de 8, 9 kilos o incluso más.

Los modelos más avanzados están equipados con pantallas LCD que ofrecen una mayor cantidad de información, como el tiempo restante para finalizar el ciclo de lavado, el estado del detergente, el programa en uso, entre otros datos relevantes. Además, en algunos casos, incluso podemos controlar estas lavadoras desde nuestro dispositivo móvil, como se detallará más adelante.

El tipo de motor es otro aspecto crucial a considerar. Los motores mecánicos tradicionales han perdido algo de relevancia en términos de rendimiento, aunque siguen siendo una opción económica y se encuentran en modelos de gama media-baja. Sin embargo, en los últimos años, los motores eléctricos conocidos como Direct Drive están siendo cada vez más comunes. Estos motores prescinden de correas, poleas y escobillas, consistiendo en su mayoría en un rotor con imanes que mueve el tambor.

Estos motores son más silenciosos, eliminan componentes mecánicos que solían ser propensos a averías, prolongando así la vida útil de la lavadora. Además, aquellos que incorporan tecnología Inverter mejoran la eficiencia y reducen el consumo eléctrico.

La velocidad de centrifugado que suelen ofrecer los modelos actuales tiende a ser de al menos 600 revoluciones por minuto (rpm). Sin embargo, se recomienda optar por modelos que tengan una velocidad de centrifugado de al menos 1000 rpm, especialmente si vivimos en áreas con climas húmedos y no planeamos adquirir una secadora por separado.

Hablando de eficiencia energética, las lavadoras son uno de los electrodomésticos que más consumen en el hogar debido a la necesidad de calentar el agua y mover una carga pesada. Por lo general, los modelos más eficientes tienden a ser más costosos, pero logran reducir de manera significativa tanto el consumo de agua como el de energía eléctrica.

El nivel de ruido es otro elemento crucial que debemos considerar, sobre todo si acostumbramos a realizar la colada durante las horas nocturnas. Cada modelo presenta información sobre su nivel de ruido en decibelios en la etiqueta de eficiencia energética, tanto durante el lavado como durante el centrifugado. En este aspecto, cuanto menor sea el valor, mejor, y se recomienda que no supere los 70-80 dB durante el pico de centrifugado máximo.

En los últimos años, la mayoría de los fabricantes han empezado a incorporar cierta «inteligencia», o más precisamente, conectividad, a sus lavadoras de alta gama. Esto nos permite gestionar y supervisar el estado del lavado a través de una aplicación móvil, conocer cuándo ha finalizado, pausarlo o iniciar el ciclo de lavado de forma remota.

Las lavadoras de gama alta más avanzadas presumen de contar con capacidades de inteligencia artificial (IA) que influyen en la mecánica de la máquina. Esto les permite ajustar en tiempo real la velocidad de giro, adaptar los ciclos de lavado en función del tipo y la suciedad de la carga, e incluso dosificar automáticamente el detergente en base al nivel de suciedad de la ropa.

Aunque estos modelos suelen tener un precio inicial más elevado, con el paso de los años, este costo se compensa mediante el ahorro en detergente y electricidad. El uso de algoritmos de IA y tecnología avanzada en la mecánica y la electrónica permite, además, reducir los tiempos de lavado mediante funciones específicas que modifican los movimientos del tambor y emplean difusores de agua en spray.

Las lavadoras más actuales incluyen la capacidad de formar parte del entorno conectado del hogar y son compatibles con asistentes virtuales como Google Assistant y/o Alexa. Esto permite darles órdenes mediante comandos de voz y, en algunos casos, incluso visualizar el estado del equipo en un televisor compatible.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *